NUESTRAS SUCURSALES

El Infierno está más cerca de lo que crees

Distintos rincones, mismo fuego, mismo sabor.

El Infierno no se quedó en Apatzingán…prendimos la brasa en Uruapan, Guadalajara y hasta en Las Vegas, llevando con nosotros todo lo que nos hace únicos:

el carbón bien encendido, el sazón de siempre y esa experiencia que solo se vive cuando te sirven un taco como Dios no manda.

AQUI SEGURO,
vas a comer bien.